domingo, 9 de enero de 2011


Pienso que rezarte a vos, tal vez me salvará el alma. No preguntes quién pone en este canto un alma destinada al sufrimiento y un pobre corazón que te ama tanto. Todo lo que de vos quisiera es tan poco, en el fondo. Porque, en el fondo, es todo. Todo eso es tan poco, yo lo quiero de vos porque te quiero. Qué mires más allá de mí. Qué me ames con violenta prescindencia del mañana. Y qué el placer que juntos inventamos sea otro signo de la libertad.


La vida es un millón de momentos. Los tenés, y de prisa se van. Las horas nos escriben un cuento. Y tu boca que me pide más. Hay mil historias detrás de un silencio. Hay olas que se roba el mar. Tu abrazo se consume en el tiempo y en vos yo quiero descansar. Hay noches de hielo. Hay alas caídas. Hay Llovizna en la acera y tu cara divina. Si tuviera que elegir, te eligiria a vos. Besándome, cuidándome, sintiéndote. Tan sólo esos momentos son los que guardo dentro. Te elegiría a vos. De nuevo a vos, amándome. Tan sólo esos momentos son los que llevo dentro de mí. La vida es un puñado de sueños y besos en la oscuridad. Velas que encienden un sentimiento y amores que renacerán. Hay mil canciones detrás de un "te quiero", ternura en un amanecer. Luces que bajan cuando estás lejos y brillan porque vas a volver. Hay tardes de fuego. Hay notas perdidas. Hay pétalos muertos y palabras vencidas. Hay risas eternas. Hay siestas con vos. Hay largos otoños que hoy tienen abrigo. Y si tuviera que elegir, te eligiria a vos. Besándome, cuidándome, sintiéndote. Tan sólo esos momentos son los que guardo dentro. Te elegiría a vos.

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